Fue así como salí del distrito donde vivo, el Callao, para entrar en el mundo estudiantil, laboral, y conocer un mundo por delante. En eso me dirigí a av. Bolívar en Pueblo Libre, donde se encuentra la oficina central de una universidad que quizás había escuchado, pero no era muy conocida aun; era la universidad San Martín de Porres, no me pareció algo grandioso, pero acepta la propuesta que me ofrecieron, es así como me decidí postular a la Universidad.
Decían muchas cosas de la universidad antes que postule, como que era el arca de Noé, porque ingresaban puros animales y que era muy fácil de entrar como la "facilazo"; pero eso no me importaba, porque una prima mía estaba estudiando Ciencia Políticas, y me dijo que a pesar de su fácil examen, porque era verdad, solo para captar alumnado, la enseñanza era sofisticada así como los equipos y los laboratorios (Esto no es un tipo de publicidad que le brindo a la universidad, sino mas bien es mi experiencia); además estaba decidido a seguir una carrera, un camino, ser profesional de Ciencia de la Comunicacion.
Siempre escuchaba a mi padre, cuando me contaba sus historias y aventuras, que quizás se mezclaba la realidad y la ficción, pero era un mundo mágico, de palabras y expresiones, en el cual me involucre tanto, que desde pequeño pensé en ser escritor; aunque desde mis inicios tenia una horrorosa redacción, siempre me ha apasionado escribir. Mis primeros escritos fueron cuando me enamore a la edad de 15 años de una muchacha que me hizo soñar y sobre todo escribir...
Decían muchas cosas de la universidad antes que postule, como que era el arca de Noé, porque ingresaban puros animales y que era muy fácil de entrar como la "facilazo"; pero eso no me importaba, porque una prima mía estaba estudiando Ciencia Políticas, y me dijo que a pesar de su fácil examen, porque era verdad, solo para captar alumnado, la enseñanza era sofisticada así como los equipos y los laboratorios (Esto no es un tipo de publicidad que le brindo a la universidad, sino mas bien es mi experiencia); además estaba decidido a seguir una carrera, un camino, ser profesional de Ciencia de la Comunicacion.
Siempre escuchaba a mi padre, cuando me contaba sus historias y aventuras, que quizás se mezclaba la realidad y la ficción, pero era un mundo mágico, de palabras y expresiones, en el cual me involucre tanto, que desde pequeño pensé en ser escritor; aunque desde mis inicios tenia una horrorosa redacción, siempre me ha apasionado escribir. Mis primeros escritos fueron cuando me enamore a la edad de 15 años de una muchacha que me hizo soñar y sobre todo escribir...