miércoles, 17 de noviembre de 2010

Simple y feliz dia de sol: otoño o primavera

Nada más feliz que un día de sol en pleno otoño o primavera. Ya no se sabe mucho con el clima, se ha convertido en algo tan impredecible. Loa maldita puerta se abre haciendo un sonido chirrido, que altera el momento ecuánime de mi espera por salir del salón de clases, casi no se nota las paredes del ensanchado salón. El gileo comienza a pocos minutos de terminar las clases, las parejas se juntan, la gente se reúne para tomarse una cervecita heladita, del grifo.

Ante todos el sol reposa en su frentes y sus cabellos relucientes, las faldas de amarillo verde y fucsia, se confunden con los shorts a cuadritos marca billabong o quiksilver, tan deseado por los jóvenes. Las chicas con sus grandes lentes, esos que les dan glamour, sus collares colorines y en abundancia en sus finos cuellos y delgadas muñecas, con aretes multicolores, y todo llamativo, es la moda de la universidad, del turno mañana y en general en todos lados, abuso de generalidad, pero a veces es así. Las sandalias abundan entre los accesorios de todos, ellos y ellas las usan, los polos apretados, mostrando los pocos bíceps y brazos, ellas pequeñas blusas mostrando un poco de lo suyo, sensuales y coquetas, del gran dios sol, para todos. La bulla se presenta en todo el patio central se alteran al verse tantos y tontos, unidos y apoderados del patio en grupos de cinco como mínimo, y se miran las caras y se ríen de ellos mismos, de lo que paso ayer en el facebook, o de la playa al cual irán este fin de semana, se ríen de sus notas, del profesor que se confundió una palabra, o de las nuevas ideas adquiridas en las aulas, son días de sol, y las clases ya tiene un mes de iniciada, parece que todos se conocen, y se entregan al alboroto creado en medio del patio, que pasó?, una estrella caminaba entre toda la multitud, todos los jovencito la miraban pasar, no tenía lentes de glamour, ni aretes colorines, tampoco collares en su fino cuello o su delgada muñeca, tenía un jean, verde con rayas plomas, y un plomo blanco con unas palabras escritas en inglés, que decía I LOVE YOU .

Era tan preciosa y no necesitaba nada de lo que las otras chicas tenían entre sus accesorios. Nadie la seguía pero todos la miraban se dirigía hasta la puerta de salida. Me acercaba a la puerta mientras mi mirada seguía la escena que alborotó a toda la multitud, y esa atención se dirigía hacia mí, evitaba que viniera pero no se podía, era inevitable, no podía correrme, era un día feliz de mucho sol, se acercaba lentamente en mis pensamiento, pero de paso rápido en realidad, y la mire y nos miramos, a pesar de que miraba a todos me encanto mirarnos, sentí que yo también estaba dentro de su mirada, y nos volvimos a mirar como si nuevamente lo queríamos los dos, evito mirarme por tercera vez, pero evitarlo le basto de poco para darme cuenta que realmente quería verme un a tercera vez. ¿Amigos?.. no yo solo quería un besito de su labios, tan tiernos y que sin labial u otra esencia se veían divinos y carnosos, no necesitaba de nada más que de ella, para verse hermosa, y sus cabellos tan lacios, se desvanecía en el viento, en lo poco que había de viento, mi timidez me inundo nuevamente, pero mirarla y saber que nos miramos, fue genial, que me robo un par de páginas.. Y que queda en mi recuerdo.. Fue algo tan simple y cotidiano...